1. ¿CÓMO AFECTAN TUS PENSAMIENTOS A TU AUTOESTIMA?
Nuestro cerebro la mayor parte del tiempo funciona de forma automática, por lo que hay pensamientos que pueden ser negativos para nuestro bienestar. ¿Quieres saber cuales son los 6 pensamientos o sesgos que afectan a tu autoestima y cómo solucionarlos?
¡Los vas a tener! Pero primero dime…
¿Sabrías decir cuánto te molas a ti mismo?
A veces, por no decir la mayoría del tiempo, nos cuesta horrores describirnos desde una perspectiva positiva.
Si ahora te pidiese que dijeses tres cosas buenas de ti mismo y otras tres que mejorar muy seguramente los tres aspectos a mejorar te saldrían más fácil y rápido.
Interpretamos de forma incorrecta el mundo y basamos nuestras experiencias en todos esos errores que nos acabamos creyendo.
Por eso es muy útil basarnos en datos objetivos que nos puedan demostrar quienes somos, nuestro autoconcepto.
¿El autoconcepto?¡Que interesante! Te dejamos por aquí el enlace a un artículo que explica más detalladamente sobre ello.
CLICK AQUÍ: ¿Qué es el autoconcepto y por qué es tan importante?
No nos podemos fiar del autoconcepto que tenemos ya que muchas veces tenemos esas interpretaciones erróneas, por lo que te propongo un ejercicio.
Nos gusta mucho utilizarlo en nuestras sesiones, le llamamos la «herramienta de los éxitos». Quiero que reflexiones sobre éxitos de tu vida, tanto personales como profesionales o académicos. ¿Cuáles son tus éxitos?
Una vez los tengas claros quiero que pienses que atributos has necesitado para conseguir esos éxitos…
¡Eso son los atributos que te representan!. Si has necesitado esos atributos para conseguir tus éxitos en algún momento de tu vida es por que eres de esa forma.
Hay muchos ejercicios que pueden ayudarte a generar un autoconcepto realista y a partir de conocimientos objetivos, ya que nuestro cerebro como ya hemos dicho… muchas veces nos engaña.
Estas interpretaciones fallidas se llaman sesgos y a veces no nos los quitamos de encima porque ni nos planteamos que puedan ser erróneos.
A parte de seguir cuestionando el mundo, una forma sencilla de combatir esto es pensar evidencias que desmienten esas teorías mentales que te rondan por la cabeza y si además las anotas en un papel (o en notas del móvil que es más moderno) te beneficiará todavía más, además de hacer nuestro ejercicio de los éxitos.
Esto es bueno para ti, para tu entorno, para tu vida. Reinterpreta, siempre que puedas.
2. ¿CÓMO AFECTA TU AUTOESTIMA EN TU FORMA DE INTERPRETAR EL MUNDO?
Para comprender la autoestima tenemos otro artículo que nos viene como anillo al dedo. Te lo dejo por aquí para que le eches un vistazo.
CLICK AQUÍ: ¿Cómo Mejorar Mi Autoestima Para Siempre?
Podríamos decir que se nos hace más fácil infravalorarnos que valorarnos adecuadamente, y es que como ya habrás oído el cuerpo es “sabio”.
Pero es una verdad que por evolución, se nos hace más sencillo focalizarnos en lo negativo ya que de esta forma estamos más preparados para afrontar los problemas.
Sin embargo, a pesar de que para el cerebro sea más fácil simplificar toda la información (y siempre lo hace de forma pesimista) no es una buena perspectiva para llevar el día a día.
No estamos en la selva, no tenemos que ponernos en lo peor para defendernos de posibles peligros. Cada ruido que oigamos no tiene por qué ser un tigre que nos quiere devorar.
3. SESGOS QUE AFECTAN A NUESTRA AUTOESTIMA
Ahora si que hemos llegado. Los 5 pensamientos que afectan a nuestra autoestima están a punto de presentarse frente a nosotros… ¿Estáis preparados?
¡OJO! Por qué yo sé que además de leer también te gusta ver y es posible que te apetezca ver un vídeo sobre lo que vamos a hablar a continuación.
A sus órdenes, por aquí tienes uno de nuestros vídeos en el que hablamos exactamente de estos sesgos que muchas veces no nos permiten ser felices.
¿Crees que distorsionas la realidad?
¿Consideras que tu autoestima se ve perjudicada a causa de estas distorsiones?
Es bastante probable, pero no te preocupes porque aquí te contaremos los principales sesgos y cómo superarlos.
¡Vamos allá!
1. SOBREGENERALIZAR
Cuando pensamos que si algo nos ha pasado alguna vez o nos hemos sentido de una determinada forma en un sitio, siempre va a pasar lo mismo y siempre nos vamos a sentir igual.
Es como coger una sola característica que nos ha resultado negativa y teñir toda nuestra realidad con esa característica.
Por ejemplo, si vamos a una entrevista de trabajo y nos ponemos nerviosos y resulta que no cumplimos con las expectativas que teníamos.
Ya creeríamos que todas las futuras entrevistas de trabajo nos van a ir mal y nos vamos a poner nerviosos.
¿Qué sentido tiene esto realmente?
¿Cómo podemos pensar que algo va a ocurrir siempre de la misma forma solo por un simple antecedente?
No tiene ningún sentido objetivo en la vida real si lo pensamos con calma.
SOLUCIÓN AL SESGO
La forma de actuar frente a estos pensamientos es buscar y por supuesto encontrar pruebas que nos desmientan esas generalizaciones y sobre todo ser conscientes de lo irracionales que pueden llegar a ser.
- Coge papel y boli, escribe los argumentos en contra que existen de lo que estás
pensando ahora mismo.
- Céntrate en tu diálogo interno y cámbialo usando esa información más razonable.
“Esa entrevista de trabajo sí me salió mal, fue un desastre pero ¿qué hay de esa otra que hice? Esa salió bien, no estaba nervioso, por eso en la próxima podré bordarlo otra vez”.
Este tipo de diálogos internos son los que necesitamos para dejar atrás esa tendencia a generalizar todo.
2. ETIQUETAS GLOBALES
Esto nos pasa cuando de uno o dos rasgos muy característicos ya sacamos conclusiones personales.
Lo hacemos tanto con otras personas como con nosotros mismos.
Es una forma de reducir la realidad que no nos beneficia para nada, así que basta ya.
¿Nunca te ha pasado que cuando alguien te cae mal, todo lo que hace te molesta?
Y no te paras a ver cosas buenas de él o ella, pues siento decirte que estás etiquetando globalmente a esa persona.
Tiene solución, aunque está claro que no te tiene que caer bien todo el mundo, sería bastante distópico.
“No he sabido contestar a mi profesor, soy un inútil”
Carece de sentido cuanto más lo piensas, necesitaríamos un montón de situaciones más para poder decir que somos inútiles y aun así nos faltarían motivos.
SOLUCIÓN AL SESGO
Tenemos que ser conscientes que es muy marciano sacar conclusiones así a la ligera.
Así que lo que vas a hacer, es coger un pos-it y apuntar más cosas que sí eres (por supuesto buenas) y ver cómo te definen muchos más aspectos, que una simple conclusión sacada a la ligera.
“A veces puedo no saber contestar al profesor y eso significa que tendría que mirarme los apuntes con más frecuencia”.
Una situación o una acción no te define en tu totalidad, ni a ti, ni a mí, ni a nadie. Es absurdo.
Está claro, que hay aspectos nuestros no tan positivos que tenemos, algunos podremos trabajarlos para cambiarlos, con otros tendremos que aprender a convivir (aquí reaparece nuestro amigo el diálogo interno, de verdad no lo abandones).
Es muy importante saber que nos definen muchísimas características y no las dos o tres que constantemente tenemos en mente.
3. RAZONAR EMOCIONALMENTE
Lo que sentimos es lo que somos y no hay más. Entendemos que las cosas son tal cual las percibimos sin atender a otros factores.
No nos viene nada bien creernos tanto estos pensamientos.
“Si me siento idiota, es que soy idiota”.
Otro ejemplo sería pensar que como una persona nos hace sentir inferiores, somos inferiores.
Por supuesto que no, de nuevo no tiene ningún sentido entender el mundo así.
Es algo muy común pero no pasa nada, tendremos que estar atentos para poder enfrentarnos y no engañarnos a nosotros mismos.
SOLUCIÓN AL SESGO
Cada vez que nos sintamos así, pararnos a reflexionar si estamos haciendo un juicio objetivo y si no nos estamos dejando guiar por nuestras emociones.
“Me puedo sentir idiota en este preciso momento, pero ¿significa que realmente soy idiota?»
¿Qué he hecho para llegar a esa conclusión?
Pensar las cosas de está forma nos guiará a conclusiones por las que no nos desvalorizaremos. Hacerlo detenidamente, dejándonos el tiempo que necesitemos.
4. SESGO CONFIRMATORIO
Recordamos las cosas de forma parcial para que cuadren con pensamientos e ideas que nos habíamos hecho anteriormente.
Se trata de prestar atención solo a lo que nos interesa y encaja con nuestras creencias, de forma inconsciente. El problema es que no lo usamos a nuestro favor.
¿Te acuerdas cuando en clase atendías solo a ratos, de forma selectiva, y te quedabas con la mitad de la información?
Luego era más difícil hacer los deberes y aprobar los exámenes, pues con la vida pasa lo mismo, si solo atendemos a unas cosas, se nos hace cuesta arriba.
Por ejemplo, si eres alguien tímido solo te fijarás en situaciones en las que sea evidente que no eres la persona más abierta del mundo.
Solo verías algún mal gesto, te quedarías con algo que ha dicho alguien, si alguna vez no te contestan te lo podrías tomar peor de lo que es.
Todas esas puertas son datos en los que nos podemos fijar, y muchas veces elegimos las puertas que nos demuestran que ese pensamiento negativo que tenemos sobre nosotros mismos es cierto.
SOLUCIÓN AL SESGO
No podemos seguir haciendo esto porque estamos sacando las cosas de contexto y sobre todo, estamos siendo muy poco justos con nosotros mismos.
Lo más importante es ser racionales. Hay que pensar situaciones que puedan tanto confirmar como desmentir los juicios que hacemos. Y a partir de ahí sacar conclusiones que sí serán acordes a la realidad. (O por lo menos, más de las que hacíamos antes).
Puede que sí haya habido un mal gesto o un comentario, pero no es la única información que tienes. La atención tiene que ir hacia todos lados y fijarnos en actitudes que, como ya hemos dicho, confirmen o no las conclusiones que sacamos.
5. LECTURA DE PENSAMIENTO
Esta es muy típica, supongo que alguna vez has creído saber lo que piensan los demás y sacar conclusiones sobre sus comportamientos como si te pudieses meter en sus cabezas.
Siento decirte que siempre han sido conclusiones erróneas, porque no eres el genio de la lámpara.
Por suerte o por desgracia, no nos han dotado con el superpoder de leer mentes así que deja de intentarlo.
No tenemos una base sólida para inferir todas esas ideas.
“Son mis amigos por pena”, “Solo está conmigo por interés”, “Seguro que me está mirando así porque voy mal vestido” entre tantos ejemplos que podría escribir de este tipo de pensamientos.
Es dañino, dejémoslos atrás. Nos hacen daño porque nos los creemos y porque usamos esta “habilidad” (habilidad de mentira, te recuerdo que no puedes leer mentes) para pensar de forma negativa. ¡Qué casualidad que nuestra bola de cristal nunca nos dice que van a pasarnos cosas buenas!
SOLUCIÓN AL SESGO
Para dejar de actuar así, tenemos que saber que esos pensamientos son simplemente hipótesis sesgadas de forma negativa y por tanto tendremos que buscar evidencias que no las confirmen o que nos las desmientan.
Hay que ser escépticos en estos casos y dudar de estas creencias. Una herramienta muy eficaz cuando se trata de gente cercana es la comunicación, no tengas miedo y comunica estas inquietudes a la otra persona.
“No puedo dar por hecho que está conmigo por interés, tendré que analizar de forma racional sus actos. También podría preguntárselo y dejar de jugar a adivinar cosas”.
6. PERSONALIZACIÓN
Está bastante relacionada con la anterior, nos afecta de forma negativa de la misma forma porque tendemos a ponernos en lo peor.
Puede que algunas veces creamos que todo lo que hacen y dicen las personas de nuestro alrededor tiene que ver con nosotros mismos.
Es una forma incorrecta de hacernos responsables de lo que ocurre, echarnos la culpa de manera injusta.
Por ejemplo, si vemos a un colega enfadado tenderemos a pensar “Está cabreado por mi, algo habré hecho para que este así” y claramente no.
¿Qué nos creemos? No somos la única realidad de cada persona al igual que cada persona no es nuestra única realidad.
SOLUCIÓN AL SESGO
De nuevo, la forma de romper con estos pensamientos es tratar de encontrar evidencias que justifiquen esos juicios que hacemos.
- Entendamos que vemos el mundo desde nuestro punto de vista y nuestro filtro, por tanto pensar que nosotros tenemos algo que ver en lo que nos rodea es muy común. Por otro lado, pensar que algo es responsabilidad/culpa mía me da cierto grado de control. Si es por mi, yo puedo hacer algo para que eso cambie. Y ya sabemos que el control es algo que nos encanta.
- Pensemos que de igual forma que nosotros tenemos nuestra realidad y circunstancias, los demás tienen la suya. Una realidad donde hay muchísimos elementos además de nosotros y nuestra relación con él/ella. Por tanto no somos la única opción a la hora de pensar sobre el motivo de que nuestro amigo esté mal.
- ¡Comunícate! Dale la opción a que te cuente qué le ocurre, y si realmente piensas que has tenido algo que ver, exprésaselo y dale la oportunidad de que lo confirme o desmienta.
Además de entender que no podemos permitirnos estar continuamente maquinando esas ideas.
“Ahí esta nuestro amigo, parece enfadado. Vamos a ver si podemos hacer algo o si nos dice a que se debe su cabreo. Igual hasta puedo ayudarle”.
4. ¡TENEMOS LAS HERRAMIENTAS PARA AFRONTARLO!
En conclusión, queda claro que muchas veces distorsionamos la realidad de forma que nos perjudica.
Esto nos provoca que nos creamos aspectos negativos de nosotros mismos que casi todas las veces no se acercan a la realidad.
El mundo es así pero la buena noticia es que tenemos las herramientas suficientes para romper esas creencias erróneas.
Todos tenemos y tendremos sesgos como estos, nunca podremos eliminarlos por completo, pero sí que podemos reducirlos al máximo para poder vivir más tranquilamente y sin que afecte a nuestra autoestima.
Hemos tenido muchos clientes que creían que no podrían acabar con ello y lo hicieron, por lo que tú también lo puedes hacer.
Comienza a hacer esos pequeños cambios que te lleven en la buena dirección y si necesitas ayuda contacta con un profesional.
Son situaciones complicadas que pueden afectar mucho a nuestra vida, así que si tomas la decisión de afrontarlo es maravilloso.
Lo más importante es pararnos a reflexionar y concentrarnos en sacar juicios realmente objetivos y para esto calma, que igual no salen a la primera.
Tenemos siempre que intentar llegar a evidencias y rasgos que desmientan o no esos pensamientos negativos.
Y si resulta que se nos confirman esas creencias, aceptar lo que somos y saber que muchas de ellas serán aspectos que mejorar.
Dividiremos el enfrentarnos a estos sesgos en; detectar pensamientos, discutirlos (el diálogo interno es maravilloso) y buscar pensamientos alternativos.